Educar a los diferentes tipos de inteligencia
Educar a los diferentes tipos de inteligencia es clave para potenciar el desarrollo personal y asegura que dicho individuo progrese personal y profesionalmente.
Pero… ¿Qué es la inteligencia?
A menudo, cuando pensamos en personas inteligentes, nos puede venir a la mente la imagen de algún científico famoso, un escritor/a, un matemático/a, etc.
Pero, si tomamos la inteligencia como la capacidad de resolver problemas, razonar y aprender, también podría serlo un actor o hasta un cantante de Reguetón… 😊
¿Por qué no?
¿Te imaginas a Leonardo da Vinci componiendo canciones o a Brad Pitt desarrollando una vacuna para la Covid?
Cada uno/a es especialista en su campo y sería difícil imaginar que se diese el caso del ejemplo anterior, ¿verdad?
Por lo tanto, no podemos afirmar que una persona sea más inteligente que otra. Cada persona puede ser un genio en diferentes campos, cada uno/a tiene más capacidad de aprendizaje en un ámbito que en otro.
La realidad nos ha demostrado que hay gente con malos resultados académicos pero que, por el contrario, son genios del deporte, de los negocios, del arte…
¿Qué tipos de inteligencia podemos encontrar?
Si atendemos al punto anterior, podemos ver diferentes tipos de inteligencia:
- Matemática.
- Lingüística.
- Musical.
- Espacial.
- Interpersonal o intrapersonal.
- Corporal…
Evidentemente, cada persona puede ser hábil en distintos tipos de inteligencia.
Además, si es cierto que una persona puede tener habilidades innatas en un tipo de inteligencia u otra, estas pueden aumentar si se desarrollan o estimulan adecuadamente.
El sistema educativo
Hasta hace relativamente pocos años, hemos visto cómo el sistema educativo ha potenciado en exceso la inteligencia lingüística o verbal y la matemática o lógica, dejando muchas veces de lado al resto.
Sin embargo, por suerte, hoy en día podemos ver como algunas escuelas toman conciencia de ello e impulsan el desarrollo de diferentes habilidades personales.
Al fin y al cabo, la clave es adaptar a las personas a las necesidades actuales laborales, en las que se pide al individuo que tenga desarrolladas varias capacidades.
Por ejemplo, un ingeniero/a necesitará tener habilidades matemáticas para el desarrollo de un prototipo, pero también deberá tener habilidades interpersonales para trabajar en equipo o lingüísticas para transmitir sus conocimientos a sus compañeros.
La formación, uno de los aspectos clave
Como hemos dicho, educar a los diferentes tipos de inteligencia es posible gracias a su estimulación, a fomentar un proceso de aprendizaje.
De esta manera, si en tu trabajo, por ejemplo, necesitas desarrollar una habilidad, la formación resultará un aspecto clave para el crecimiento, una base a partir de la cual podrás potenciar al máximo tu inteligencia.
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